¿Qué es la flexografía?

En Bolsalea utilizamos este proceso de impresión como uno de los métodos para dar vida a vuestras bolsas personalizadas. Como ya sabéis, siempre ofrecemos la posibilidad de que customicéis nuestros productos a vuestro gusto, combinando colores con tamaños y materiales. Esta libertad es extensible, también, a la cantidad que podéis adquirir de bolsas de papel, y ahí radica la clave de la flexografía. Si vuestros pedidos son a partir de 3.000 unidades, este proceso de impresión dará forma al diseño que elijáis impreso en las bolsas de papel.

¿Cómo funciona la impresión en flexografía?

Las bolsas impresas en flexografía se basan en un tipo de impresión automática y no manual, algo que lo diferencia de la serigrafía de alta calidad que desarrollamos para pedidos de poca cantidad y en las que entran en juego una plancha sobre la que reposa el fotolito con la información sobre el diseño que se imprime a la bolsa que se halla debajo. Por el contrario, en la flexografía el proceso está automatizado por el uso de rotativas que usan una pieza con relieve para la impresión. Esta pieza se llama cliché y es una bobina de goma que recoge, mediante transferencia por contacto con otra, la tinta y, a su vez, porta esta al material, en este caso a vuestra bolsa personalizada, con el diseño elegido.

1. Preparación del cliché: el diseño se transfiere a un cliché, una bobina de goma con relieve que actúa como la placa de impresión. Este cliché recoge la tinta desde un rodillo entintador y la transfiere al material que se está imprimiendo.
2. Rotativas: la flexografía utiliza rotativas que permiten una impresión continua, ideal para grandes tiradas. El material a imprimir, como papel, se desplaza a través de estas rotativas, donde el cliché en contacto con la tinta transfiere el diseño de manera precisa.
3. Transferencia de tinta: la tinta se aplica mediante transferencia directa desde el cliché al material, lo que garantiza una impresión rápida y eficiente. Este proceso es perfecto para grandes cantidades de producción sin sacrificar la calidad del diseño.

¿Qué materiales se pueden imprimir en flexografía?

La flexografía es una técnica versátil que permite imprimir en una amplia variedad de materiales. En Bolsalea, utilizamos esta técnica para imprimir en:

• Bolsas y sobres de papel: estos productos son adecuados para quienes buscan una opción ecológica. Nuestras bolsas y sobres de papel son reciclables, reutilizables, biodegradables y compostables, lo que las convierte en una opción sostenible para todo tipo de envíos y embalajes. Además, el papel que utilizamos posee el sello PEFC, lo que garantiza que proviene de bosques gestionados de manera responsable, promoviendo la sostenibilidad forestal.
• Bolsas de tejido reciclado: fabricadas con un 50-70% de material reciclado, estas bolsas son una opción duradera y sostenible. Son reutilizables y reciclables, lo que reduce significativamente su impacto ambiental. Además, cuentan con los sellos BRC y OEKO-TEX, que certifican su seguridad para el contacto con alimentos y su respeto por el medio ambiente en términos de sostenibilidad y seguridad textil.

Gracias a su adaptabilidad, la flexografía permite imprimir sobre materiales con diferentes texturas y grosores, manteniendo siempre una alta calidad de impresión.

Tintas utilizadas en flexografía: opciones y sostenibilidad

En Bolsalea, somos conscientes de la importancia de utilizar tintas sostenibles en nuestros procesos de impresión. Por eso, en flexografía empleamos:

• Tintas a base de agua: estas tintas son ecológicas, ya que no contienen alcohol y tienen un impacto ambiental reducido.

Estas tintas no solo garantizan la calidad de impresión, sino que también están en línea con nuestra misión de ofrecer productos sostenibles y responsables.

Comparación de la flexografía con otras técnicas de impresión

La flexografía se destaca por su eficiencia en grandes tiradas y su capacidad para imprimir sobre una variedad de materiales. Comparada con otras técnicas de impresión:

• Flexografía vs. serigrafía: mientras que la serigrafía es ideal para tiradas pequeñas con alta precisión y colores vibrantes, la flexografía es más adecuada para grandes volúmenes y materiales flexibles, aunque con menos intensidad en los colores.
• Flexografía vs. impresión digital: la impresión digital es excelente para personalizaciones rápidas y tiradas cortas, pero la flexografía supera en velocidad y costo cuando se trata de grandes cantidades.
• Flexografía vs. impresión offset: La impresión offset es preferida para papel de alta calidad y detalles finos en grandes tiradas, pero la flexografía ofrece mayor versatilidad en materiales y formas, siendo más adecuada para envases y bolsas.

Tendencias actuales en flexografía para packaging y bolsas

La flexografía sigue evolucionando con las demandas del mercado, y algunas de las tendencias actuales incluyen:

• Sostenibilidad: hay un enfoque creciente en el uso de materiales y tintas ecológicas, como papeles reciclados y tintas a base de agua, alineándose con la creciente demanda de productos eco-friendly.
• Innovación en diseño: la flexografía permite incorporar acabados especiales, como relieves y barnices, que mejoran la estética y funcionalidad de los envases y bolsas.
• Impresión de alta definición: Los avances tecnológicos están permitiendo que la flexografía logre una resolución de impresión más alta, acercándose a la calidad que se espera de técnicas como el offset, pero con la ventaja de poder aplicarse en una variedad de materiales.

Para certificar que las impresiones sean correctas y respetuosas, al final de los procesos, incluso los automáticos de impresión como la flexografía, hay control de calidad que se encarga de revisar los resultados y que todo haya cumplido los parámetros para los que trabajamos escrupulosamente. Estos son los procesos de calidad que permiten ofreceros un producto #MadeInSpain , productos que no encontraréis en ningún otro lugar. Calidad, cuidado y amor, también presentes en nuestras flexografías.