Los escaparates abiertos y cerrados

“¿Ser o no ser?” se preguntaba, atormentadamente, Shakespeare en su Hamlet. Con algo menos de angustia pero con la misma carga vital, un comercio tiene que estudiar las cualidades de los escaparates abiertos y cerrados para acertar en su estrategia de visual merchandising.

Ya sabemos la importancia que una buena política de actuación en este ámbito tiene para cualquier negocio por el peso el componente visual en la decisión de compra. Aunque no es el único, con el creciente desarrollo de otros sentidos para mejorar la experiencia. Y si hablamos del componente visual tenemos, obligatoriamente, que aludir a su parte exterior, el primer reclamo: el escaparate.

Los típicos y más clásicos siempre han sido cerrados. Esto le confiere un peso específico al espacio y la posibilidad de, dentro de la línea de la firma, crear un ambiente aparte, un mundo propio que invite a entrar por el misterio que al transeúnte le genera no saber qué habrá dentro de la tienda.

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Si decides usar este tipo de escaparate debes tener en cuenta el tipo de fondo que quieras mostrar (colores y texturas) ya que formará parte de la composición y debe complementarse a ella. 

Si sabéis sacarle partido a esto, podréis ganar el respeto de aquellos potenciales clientes con algo más de imaginación que conciben la compra como una experiencia en sí misma.

Los potenciales clientes que primen más la practicidad agradecerán un escaparate abierto, es decir, sin una pared detrás que les imposibilite ver el interior de la tienda. Lo que caracteriza a esta técnica es que el interior de nuestra tienda visible en el escaparate forma parte de este también.

A la hora de montarlo, debemos tener en cuenta que los elementos que pongamos en frente del escaparate van a perder algo de relevancia pero eso está bien. Se trata de encontrar un equilibrio entre lo que quieres comunicar y lo que puedes mostrar para que la imagen en conjunto atraiga a tu cliente.

El visual merchandising interior para un escaparate abierto se hace vital ya que debe llamar la atención del potencial cliente en un instante, por el conjunto tanto del escaparate en sí mismo como del “escaparate interno” para cruzar el umbral.

En esta tesitura de escaparates abiertos y cerrados, es importante tener en cuenta la versatilidad de los espacios: Esto significa que dispongan de un mobiliario, una estructura y una mentalidad que permitan adaptar la apariencia de la tienda a sus necesidades.

Podéis organizar presentaciones, talleres, un tipo de tienda pop up store, campañas promocionales, en definitiva, actividades que os hagan reajustar áreas de la tienda y hacer visibles esos reajustes, desde fuera, con un escaparate también versátil. Un escaparate que muestre el dinamismo que vuestro comercio tiene, también, por dentro.

Por ello es bueno que tengáis en cuenta cómo os pueden servir los escaparates abiertos y cerrados para transmitir toda vuestra filosofía, todo lo que sois, como la potente herramienta comunicativa que son.

Consejos para la decoración de los escaparates abiertos y cerrados

A la hora de pensar diferentes técnicas para decorar los escaparates abiertos o cerrados, hay que tener en cuenta una serie de cuestiones.

Por un lado, dependiendo de la época en la que nos encontremos utilizaremos una temática u otra. No es lo mismo montar el escaparate de principios de verano que el escaparate de Navidad, debemos ajustar nuestra temática a la epoca del año en la que nos encontramos.

Para ello te recomendamos que crees un calendario con los diferentes escaparates que te quieras realizar a lo largo del año. En el deberás incluir también los días que dedicarás a montarlo y a desmontarlo, esto te dará un mejor control de las fechas clave y te evitarás hacer todas las preparaciones corriendo por una mala planificación.

Asimismo, la renovación del stand es fundamental para atraer la atención de la clientela. Por lo que al realizar cambios semanalmente o mensualmente, puede llegar a ser un punto a favor para mejorar las ventas del negocio. No hace falta cambiar todo el diseño del muestrario, basta con modificar algunos elementos, como por ejemplo los productos expuestos. La rotación de los artículos es una ventaja para mostrar el surtido de tu tienda.

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De la misma manera, la utilización de maniquíes o expositores es recomendable para dar al muestrario un toque de atractividad. Así podrás fascinar a los visitantes.

De igual forma, las tonalidades que se vayan a emplear deben de estar acordes con la etapa del año en la que nos encontremos. Por ejemplo, en la época de verano los colores cálidos como el rojo o amarillo son ideales para utilizarlos de fondo para el muestrario.

Otro punto esencial a tener en cuenta es la estructura de la composición, que puede ser horizontal o vertical. Dependiendo del diseño del escaparate y de los productos que comercializa el local, puede llegar a ser una u otra.

Así mismo, emplear diferentes tipos de promociones es un buen método para invitar a la clientela a tu tienda. Ponlas a la vista y capta la atención de las personas que pasean en una mañana de compras. Piensa que antes de qué existieran las redes sociales, las personas solo veían anuncios en las fachadas de los establecimientos. Es una técnica que nunca pasará de moda al igual que el hecho de visitar tiendas.

Por último, hay que tener en cuenta la posición e intensidad de la luz para resaltar los productos. Lo ideal es diseñar la idea del stand. De esta forma, posteriormente puedes colocar los focos de tal manera que, resalte la mercancía expuesta.

Dependiendo del tipo de negocio que se tenga, se puede optar por un modelo de escaparate u otro. El muestrario escogido deberá atraer la atención de los consumidores potenciales. Si quieres obtener más información sobre los escaparates, te recomendamos leer este post sobre los diferentes tipos de escaparate. 

¿Qué elementos decorativos se pueden utilizar en la decoración del muestrario?

El escaparate, no es solo un medio que se utiliza para exhibir productos. También es una  herramienta para atraer la atención de los posibles compradores.

Podemos aprovechar a exponer otros elementos decorativos que estén relacionados con la estética de la tienda. Esto puede llegar a ser un buen método para impactar a los consumidores. Por ejemplo, se puede utilizar la decoración de diferentes tipos de plantas o macetas: purifican el ambiente y aportan una sensación de paz y seguridad, que es lo que busca una persona cuando decide acudir a tienda.

También, la incorporación de unas bolsitas personalizadas sería perfecto tanto para, decorar el stand como para promocionar tu marca.

En nuestra página web, puedes encontrar diferentes opciones entre las cuales están las bolsas de algodón. La tenemos disponibles en varios gramajes y medidas. Incluso, si optas por el gramaje de 145 gr de grosor, puedes escoger tu packaging entre varias tonalidades.

Aquí tienes un ejemplo de nuestro cliente Missuara y su fabulosa bolsa de 38x42 cm.

También, otra de las alternativas que te proponemos para decorar de forma elegante tu escaparate es mediante unas bolsas recicladas. Dicho de otra manera, Tejido sin Tejer.

En Bolsalea, las tenemos disponibles en varias medidas y colores. Así mismo, si decides imprimirlas con tu logo, estas se convertirían en un excelente vehículo para promocionar la imagen de tu empresa. ¿No crees? Fijate en este ejemplo de la empresa CyC y su bolsa de tela personalizada.

Además, al ser unas bolsas reutilizables, los consumidores las podrán utilizar en varias ocasiones. De esta manera, tu marca siempre quedará presente.

¿Qué escaparate es el que más se ajusta a tu modelo de tienda abierto o cerrado? Cuéntanoslo en los comentarios.